Experimento de Little Albert
Los primeros trabajos en el campo del comportamiento fueron realizados por el fisiólogo ruso Ivan Pavlov (1849-1936). Pavlov estudió una forma de aprendizaje de la conducta denominada reflejo condicionado, en la que un animal o un ser humano producía una respuesta refleja (inconsciente) a un estímulo y, con el tiempo, era condicionado a producir la respuesta a un estímulo diferente que el experimentador asociaba con el estímulo original. El reflejo con el que trabajó Pavlov fue la salivación en respuesta a la presencia de comida. El reflejo de salivación se podía provocar mediante un segundo estímulo, como un sonido específico, que se presentaba en asociación con el estímulo inicial de la comida varias veces. Una vez “aprendida” la respuesta al segundo estímulo, se podía omitir el estímulo alimentario. El “condicionamiento clásico” de Pavlov es sólo una de las formas de aprendizaje del comportamiento estudiadas por los conductistas.
John B. Watson (1878-1958) fue un influyente psicólogo estadounidense cuyo trabajo más famoso tuvo lugar a principios del siglo XX en la Universidad Johns Hopkins (Figura \(\PageIndex{1})). Mientras que Wundt y James se preocupaban por comprender la experiencia consciente, Watson pensaba que el estudio de la conciencia era defectuoso. Como creía que el análisis objetivo de la mente era imposible, Watson prefería centrarse directamente en el comportamiento observable y tratar de controlar ese comportamiento. Watson fue uno de los principales defensores de cambiar el enfoque de la psicología de la mente al comportamiento, y este enfoque de observar y controlar el comportamiento llegó a conocerse como conductismo. Uno de los principales objetos de estudio de los conductistas era el comportamiento aprendido y su interacción con las cualidades innatas del organismo. El conductismo solía utilizar animales en los experimentos bajo el supuesto de que lo que se aprendía utilizando modelos animales podía, hasta cierto punto, aplicarse al comportamiento humano. De hecho, Tolman (1938) afirmó: “Creo que todo lo importante en psicología (excepto… los asuntos que implican a la sociedad y a las palabras) puede investigarse en esencia mediante el análisis experimental y teórico continuado de los determinantes del comportamiento de las ratas en un punto de elección en un laberinto.”
Contribución de John Watson a la psicología
Los primeros trabajos en el campo del comportamiento fueron realizados por el fisiólogo ruso Ivan Pavlov (1849-1936). Pavlov estudió una forma de aprendizaje de la conducta denominada reflejo condicionado, en la que un animal o un ser humano producía una respuesta refleja (inconsciente) a un estímulo y, con el tiempo, era condicionado a producir la respuesta a un estímulo diferente que el experimentador asociaba con el estímulo original. El reflejo con el que trabajó Pavlov fue la salivación en respuesta a la presencia de comida. El reflejo de salivación se podía provocar mediante un segundo estímulo, como un sonido específico, que se presentaba en asociación con el estímulo inicial de la comida varias veces. Una vez “aprendida” la respuesta al segundo estímulo, se podía omitir el estímulo alimentario. El “condicionamiento clásico” de Pavlov es sólo una de las formas de aprendizaje del comportamiento estudiadas por los conductistas.
John B. Watson (1878-1958) fue un influyente psicólogo estadounidense cuyo trabajo más famoso tuvo lugar a principios del siglo XX en la Universidad Johns Hopkins. Mientras que Wundt y James se preocupaban por comprender la experiencia consciente, Watson pensaba que el estudio de la conciencia era defectuoso. Como creía que el análisis objetivo de la mente era imposible, Watson prefería centrarse directamente en el comportamiento observable y tratar de controlar ese comportamiento. Watson fue uno de los principales defensores de cambiar el enfoque de la psicología de la mente al comportamiento, y este enfoque de observar y controlar el comportamiento llegó a conocerse como conductismo. Uno de los principales objetos de estudio de los conductistas era la conducta aprendida y su interacción con las cualidades innatas del organismo. El conductismo solía utilizar animales en los experimentos bajo el supuesto de que lo que se aprendía utilizando modelos animales podía, hasta cierto punto, aplicarse al comportamiento humano. De hecho, Tolman (1938) afirmó: “Creo que todo lo importante en psicología (excepto… los asuntos que implican a la sociedad y a las palabras) puede investigarse en esencia mediante el análisis experimental y teórico continuado de los determinantes del comportamiento de las ratas en un punto de elección en un laberinto.”
Resumen de la teoría conductista de John B. Watson
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John B. Watson fue un psicólogo pionero que desempeñó un papel importante en el desarrollo del conductismo. Watson creía que la psicología debía ser principalmente una conducta científica observable. Se le recuerda por sus investigaciones sobre el proceso de condicionamiento.
Watson también es conocido por el experimento del Pequeño Alberto, en el que demostró que se podía condicionar a un niño a temer un estímulo previamente neutral. Su investigación también reveló que este miedo podía generalizarse a otros objetos similares.
John B. Watson nació el 9 de enero de 1878 y creció en Carolina del Sur. Ingresó en la Universidad de Furman a los 16 años. Tras graduarse cinco años después con un máster, comenzó a estudiar psicología en la Universidad de Chicago, obteniendo su doctorado en psicología en 1903.
Ejemplo de la teoría de John Watson
El conductismo, según Watson, es la idea de que la mente no puede ser observada directamente y, por lo tanto, debe centrarse en la medición del comportamiento que puede ser observado directamente. Este punto de vista del conductismo surge del rechazo al estudio de la conciencia, que considera subjetivo y poco científico. Para un conductista como Watson, la psicología es puramente objetiva al predecir y manipular la conducta.En su conductismo, Watson deja de lado el estado mental interno de una persona y se centra principalmente en la conducta externa y el entorno.
A través de su trabajo, John Watson contribuyó al estudio del comportamiento, en el que afirmó que la psicología es la ciencia del comportamiento. Con los puntos de vista de Watson sobre el conductismo y el enfoque de la psicología, introdujo principios conductistas que allanaron el camino para otros psicólogos, incluso en la psicología educativa.
El trabajo de Watson resultó valioso para la comunidad científica, como en su estudio del comportamiento animal, que ayudó a ampliar el campo de la investigación con animales. Con sus descubrimientos sobre el comportamiento animal, Watson aplicó estos mismos principios al estudio del comportamiento humano. Promovió el condicionamiento en sus experimentos, lo que más tarde ayudó a sentar las bases de los enfoques actuales del conductismo, como la terapia, el aula y la crianza de los niños. Con el legado de Watson, ayudó a establecer la psicología como una disciplina científica a través de métodos objetivos y de la experimentación. Su teoría del conductismo y la introducción de los principios conductistas prepararon a los psicólogos y educadores para el trabajo de otros conductistas en décadas posteriores.