Habilidades de un estudiante de éxito
Queremos crear un mundo más sostenible, con economías estables y sociedades más justas e inclusivas. Un objetivo difícil pero no inalcanzable si contamos con la implicación de gobiernos, instituciones, empresas y, sobre todo, de una ciudadanía responsable y comprometida.
Un ciudadano ejemplar se hace, no nace. Al igual que aprendemos matemáticas e idiomas, también deberíamos convertirnos en especialistas en aquellas enseñanzas fundamentales para vivir en armonía y progresar socialmente como el respeto, la empatía, la igualdad, la solidaridad y el pensamiento crítico. Sin estos y otros principios éticos que nos definen como seres humanos, difícilmente podremos construir un mundo mejor.
LOS OBJETIVOS DE LA EDUCACIÓN EN VALORESEste concepto se refiere al proceso educativo que inculca normas morales para crear sociedades más civiles y democráticas. Por ello, la educación en valores promueve la tolerancia y el entendimiento por encima de nuestras diferencias políticas, culturales y religiosas, poniendo especial énfasis en la defensa de los derechos humanos, la protección de las minorías étnicas y de los grupos más vulnerables, y la conservación del medio ambiente.La educación en valores es responsabilidad de todos nosotros y no sólo de la escuela. La familia, la universidad, la empresa y el deporte, por ejemplo, son contextos ideales para enseñar esos principios éticos. Aun así, desde hace unos años, países como Australia y el Reino Unido se plantean incluir la educación en valores como parte de la enseñanza obligatoria.
Buenas cualidades para un estudiante
Los valores morales son normas que ayudan a un individuo a elegir entre lo correcto y lo incorrecto o lo bueno y lo malo. Esta comprensión es necesaria para tomar decisiones y relaciones honestas, creíbles y justas en la vida diaria.
El desarrollo moral es un proceso esencial que debe comenzar desde la primera infancia. Los niños pueden formar un buen carácter y una personalidad agradable siguiendo los valores morales. La familia del niño desempeña un papel crucial a la hora de guiarle, apoyarle y llevarle de la mano.
Predicar a un niño no sirve de nada si no se practica lo que se predica. Los niños aprenden mejor observando su entorno. Dé un buen ejemplo con virtudes como la honestidad, la humildad, la responsabilidad y la compasión.
Los cuentos morales para dormir sobre temas como la honestidad, la justicia, la ayuda, etc., son buenos, pero compartir experiencias positivas de la vida real es aún mejor. Comparta esos incidentes de su vida para que su hijo se familiarice con esa moral.
Recompense adecuadamente el buen comportamiento. Este refuerzo positivo no tiene que ser necesariamente un regalo. Puede hablar con su familia sobre el comportamiento positivo de su hijo y compartir lo que hizo y su impacto. Cuando una familia elogia a un niño, aumenta su confianza y autoestima.
Cómo ser un buen profesor
Recuerde que las distintas escuelas harán hincapié en cosas diferentes en sus declaraciones de valores. Por ejemplo, algunos destacarán la tradición mientras que otros el progreso. Los colegios de una comunidad diversa probablemente también destacarán el multiculturalismo.
3. Con mentalidad comunitaria – Nuestra escuela es un eje central de nuestra comunidad. Acogemos a la comunidad en nuestra escuela para que comparta sus habilidades y conocimientos. También queremos aportar nuestras habilidades y esfuerzos para mejorar nuestra comunidad local a través del intercambio de conocimientos.
5. Cooperación – Trabajamos bien con todos nuestros amigos y compañeros. Queremos que todos aprendan y tengan éxito, y esto requiere que trabajemos juntos, nos comprometamos y compartamos, para tener éxito.
7. 7. Pensamiento crítico – Adoptamos y fomentamos el pensamiento crítico sobre los problemas del mundo. Enseñamos a los estudiantes a aprender y ser analíticos para que puedan salir al mundo como aprendices de por vida para resolver los problemas del siglo XXI.
8. Hacer a los demás – Reconocemos la regla universal de «hacer a los demás lo que hubiéramos hecho a nosotros mismos». Pensamos activamente en cómo nos gustaría ser tratados si estuviéramos en la situación de la otra persona.
Características estudiante
La educación en valores es el proceso por el que las personas se dan valores morales. Según Powney et al.[1] Puede ser una actividad que puede tener lugar en cualquier organización humana. durante la cual las personas son asistidas por otras, que pueden ser mayores, en una condición experimentada para explicitar nuestra ética con el fin de evaluar la eficacia de estos valores y el comportamiento asociado para su propio bienestar y el de los demás a largo plazo, y para reflexionar y adquirir otros valores y comportamientos que reconocen como más eficaces para el bienestar a largo plazo de uno mismo y de los demás. Hay una diferencia entre alfabetización y educación.Tech Con Bavesh[aclaración necesaria]
Una de las definiciones se refiere a ella como el proceso que proporciona a los jóvenes una iniciación en los valores, dando a conocer las reglas necesarias para funcionar en este modo de relacionarse con otras personas y buscar el desarrollo en el estudiante de una comprensión de ciertos principios subyacentes, junto con la capacidad de aplicar estas reglas de forma inteligente, y tener la disposición asentada para hacerlo[3] Algunos investigadores utilizan el concepto de educación en valores como un paraguas de conceptos que incluye la educación moral y la educación ciudadana[4][5][6] Los temas que la educación en valores puede abordar en diversos grados son el carácter, el desarrollo moral, la educación religiosa, el desarrollo espiritual, la educación ciudadana, el desarrollo personal, el desarrollo social y el desarrollo cultural. [7]