¿Es difícil la odontología?
No se puede negar que la odontología es difícil a veces. Durante la fase inicial de la pandemia mundial de 2020, cuando los consultorios dentales se cerraron y se consideraron «no esenciales» durante meses (sólo para reabrir con un flujo de pacientes diferente y nuevos gastos), muchos en nuestra profesión comenzaron a hacerse una pregunta: «¿Sigue valiendo la pena todo esto?».
Admito que he luchado con esta pregunta unas cuantas veces en el pasado. Hace algunos años, incluso llegué a un punto en el que una carta de venta estuvo sobre mi mesa durante meses, recordándome que estaba a una llamada de distancia de dejar la oficina. Incluso ahora, una parte de mí se pregunta por el futuro de nuestra profesión. Y no es por las nuevas tecnologías, la odontología corporativa o las tasas de reembolso de los seguros. Para ser sincero, es porque nuestra profesión se siente a veces marginada.
La mayoría de nosotros hemos oído a los pacientes decir que odian ir al dentista. Aunque ya estamos acostumbrados a ese sentimiento, el año pasado todavía nos duele el haber sido considerados «no esenciales». Y todos sabemos que las opciones de «bricolaje» están en auge, como si no fuera realmente necesario ir al dentista.
De la medicina a la odontología
Convertirme en dentista es lo que he querido hacer desde que tengo uso de razón. Nunca dudé de mi deseo de convertirme en dentista, pero a lo largo del proceso me pregunté si merecía la pena el tiempo y el esfuerzo. Nunca fui capaz de dar una buena respuesta. A muchos dentistas con los que hablé les «gustaba» su trabajo y no se arrepentían de su decisión de convertirse en dentistas. De vez en cuando me he encontrado con un dentista que deseaba haber elegido una carrera diferente, pero eran pocos.
Entonces, ¿qué significa «vale la pena»? Para mí, «vale la pena» significa dedicarse a una profesión que tiene prestigio y que me permite influir en la vida de los demás. Cada día trabajo con pacientes que ganan funcionalidad o aumentan su estima gracias al trabajo dental realizado. Ya sea un caso estético de coronas anteriores, la entrega de una dentadura postiza o la extracción de un diente que ha estado doliendo. Estoy continuamente estudiando el arte de la odontología para que los resultados que reciben mis pacientes sean de alta calidad. La odontología me permite estar involucrado en una profesión que fomenta una vida de aprendizaje y la práctica continua para mejorar las habilidades.
¿Debo estudiar odontología?
Desde el principio, hay que destacar que voy a escribir este post para las escuelas de odontología en el Reino Unido. Esto es importante tenerlo en cuenta porque los costes y las opciones pueden variar enormemente dependiendo del país en el que te encuentres. Por ejemplo, sé que el costo de estudiar odontología en los Estados Unidos es muy diferente. Otro ejemplo que ahora conozco bien es que no hay tasas de matrícula para la escuela de odontología en Perú (donde hice mi optativa dental este verano), pero los estudiantes tienen que pagar por todo su propio equipo/materiales.La estructura de las tasas también dependerá de si eres un estudiante «de casa» o internacional, con los costos para estudiar en el extranjero siendo enormemente inflados.
Además, debo destacar que primero hablaré de forma general sobre cómo la mayoría de los estudiantes de odontología pagan por la odontología, y luego mencionaré todas las excepciones y diferencias comunes (por ejemplo, si la odontología es tu segunda licenciatura, o si eres galés/escocés, etc.).
Estudiar odontología es una gran carga financiera. Es una carga para ti, el estudiante (y tu familia), pero también para el gobierno del Reino Unido y el NHS. Sin embargo, no dejes que los costes te desanimen o sean el factor decisivo que te aleje de la odontología: merece la pena la inversión.
¿Debo estudiar odontología?
Objetivo: Los comportamientos de higiene oral y dental de los pacientes se ven afectados por sus dentistas. Aunque los estudiantes de odontología asisten a cursos preclínicos en su primer y segundo año de formación, se espera que tengan conocimientos sobre la salud oral y dental debido a su futura posición como modelos para los pacientes. En este estudio, se pretendía evaluar el conocimiento de la salud oral y dental y los hábitos de salud oral de los estudiantes preclínicos de odontología.
Material y métodos: En este estudio se incluyeron 127 estudiantes preclínicos de odontología. Se preparó un cuestionario que constaba de 39 preguntas sobre los hábitos de salud bucodental y los niveles de conocimiento. Los resultados se analizaron con el programa informático SPSS 22.0. Un valor p inferior a 0,05 se consideró estadísticamente significativo. Para el análisis estadístico se utilizaron las pruebas Chi-cuadrado y U de Mann-Whitney.
Resultados: La frecuencia del cepillado dental diario, el sangrado gingival, la halitosis, la preferencia de pasta dental, la satisfacción con el color de los dientes y la frecuencia de las visitas al dentista resultaron ser estadísticamente significativas. No hubo diferencias significativas entre los grupos de estudiantes de primer y segundo año en cuanto a sus respuestas a las preguntas (p> 0,05). Se encontró una diferencia estadísticamente significativa entre los grupos de hombres y mujeres en cuanto a sus respuestas a las preguntas sobre temas como la preferencia de pasta de dientes, la satisfacción con el color de sus dientes, la frecuencia de los exámenes dentales, la frecuencia de la limpieza dental y el tiempo de cepillado de los dientes (p <0,05). También se comprobó que los niveles de conciencia oral y dental y de insatisfacción con los dientes eran mayores en las participantes femeninas.