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Guanabana cancer estudios cientificos

Beneficios de la graviola

Hasta ahora, los tratamientos para el cáncer de ovario metastásico se han visto limitados por los estadios avanzados en el momento del diagnóstico, la toxicidad de los fármacos y la resistencia. Además, los pacientes con cáncer recurren cada vez más a terapias complementarias y alternativas. La graviola (Annona muricata) se ha utilizado tradicionalmente en muchas afecciones, entre ellas el cáncer, y tanto los estudios in vivo como los in vitro han demostrado sus efectos anticancerígenos. Presentamos el caso de una paciente con cáncer de ovario metastásico que progresó a través de múltiples líneas de quimioterapia, pero que tuvo una respuesta y una estabilidad sostenida en los niveles de Ca-125 mientras tomaba comprimidos de graviola. Se justifica la realización de más investigaciones clínicas para evaluar el papel de la graviola en el tratamiento del cáncer.

El cáncer de ovario ocupa el sexto lugar en cuanto a muertes por cáncer entre las mujeres en Australia, siendo el responsable de más muertes que cualquier otro cáncer del sistema reproductor femenino [1]. El tratamiento del cáncer de ovario sigue siendo un reto; suele estar avanzado en el momento del diagnóstico, ya que dos tercios de los casos se diagnostican en los estadios III o IV [2]. Además, muchos de los tratamientos actuales están limitados por la toxicidad y la resistencia a los fármacos. Por tanto, es necesario explorar nuevas estrategias de tratamiento integradoras. Ha aumentado el interés por las modalidades de tratamiento alternativas que incluyen la medicina complementaria o alternativa, utilizadas solas o en combinación con otras terapias sistémicas. La graviola (Annona muricata) es un árbol frutal que predomina en las selvas tropicales de África, el sudeste asiático y Sudamérica, y se ha utilizado tradicionalmente para una amplia gama de enfermedades, como el cáncer, las afecciones inflamatorias, el reumatismo, la diabetes y las infecciones parasitarias [3]. A pesar de su uso generalizado por diversas culturas durante siglos, la investigación científica sobre sus beneficios para la salud sigue siendo muy limitada. Presentamos un caso que demuestra un importante periodo de estabilidad clínica utilizando graviola en una paciente con cáncer de ovario metastásico, cuya enfermedad había recaído previamente con múltiples líneas de tratamiento.

La graviola y el cáncer de pulmón

La guanábana y otras plantas han demostrado tener compuestos prometedores que podrían utilizarse en el tratamiento del cáncer. Es originaria de las regiones tropicales y subtropicales del mundo, se extrae del árbol Annona muricata y contiene compuestos especialmente eficaces contra las células cancerosas.

La guanábana (Annona muricata) es un pequeño árbol de hoja perenne que se encuentra en los bosques tropicales de Sudamérica, África y el sudeste asiático. En Vietnam, suele llamarse guanábana. El árbol produce frutos comestibles en forma de corazón que se utilizan para hacer caramelos, jarabes y otras delicias. Sin embargo, no es sólo un “regalo dulce”. La planta de la guanábana también tiene propiedades antibacterianas y antioxidantes. Esto ha llevado a algunos científicos a estudiar la planta de guanábana como posible opción de tratamiento para una serie de enfermedades graves, incluido el cáncer. Aunque algunos estudios de laboratorio indican que la guanábana puede tener propiedades anticancerígenas, no hay pruebas clínicas de que la guanábana pueda tratar o prevenir el cáncer en humanos.

La guanábana y el cáncer pdf

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La guanábana es originaria de América Central y del Sur. También conocida como fruta graviola, ha despertado un gran interés en los últimos años debido a sus posibles beneficios medicinales. Aunque algunos estudios han demostrado que la guanábana puede tener beneficios anticancerígenos para los cánceres de próstata, mama, colorrectal y páncreas, las pruebas de estos beneficios aún no son concluyentes.

La fruta se encuentra principalmente en la selva tropical del sudeste asiático, Sudamérica y África. Su nombre científico es Annona muricata. Otros nombres son chirimoya, guanábana y pawpaw brasileño. En América, la fruta es más conocida como guanábana.

La guanábana se suele comer cruda, cortando la fruta por la mitad y sacando la pulpa. También se puede incorporar a jarabes, batidos y postres como helados, caramelos y bebidas dulces. Las hojas también pueden utilizarse para preparar un té.

Cápsulas de graviola para el cáncer

Los expertos advierten del uso de la fruta de la guanábana para tratar el cáncer. Aunque las investigaciones sugieren que la guanábana puede combatir el cáncer, no se ha estudiado en humanos. Por lo tanto, no hay pruebas de su seguridad o eficacia.

Los expertos advierten que no se debe utilizar esta fruta para tratar el cáncer. Aunque las investigaciones sugieren que la guanábana puede combatir el cáncer, no se ha estudiado en humanos. Por lo tanto, no hay pruebas de su seguridad o eficacia.

Este fruto largo y espinoso procede del árbol de la graviola, una planta perenne originaria de México, el Caribe y América Central y del Sur. También se conoce como chirimoya, guanábana y pata brasileña. Los practicantes de la fitoterapia utilizan el fruto de la guanábana y las hojas del árbol de la graviola para tratar dolencias estomacales, fiebre, infecciones parasitarias, hipertensión y reumatismo. También se utiliza como sedante.

Pero las afirmaciones sobre las propiedades anticancerígenas de la fruta son las que más han llamado la atención. Un estudio publicado en el Journal of Medicinal Chemistry en 1997 sugiere que los compuestos de guanábana probados en células de cáncer de mama en cultivo fueron más eficaces que la quimioterapia para destruir las células. Pero, sin ensayos clínicos, no hay datos que respalden esta afirmación.