Construir una Marsbase es una idea horrible: ¡Hagámoslo!
Los poemas de Federico García Lorca son un tesoro literario, uno de los estandartes más brillantes de las letras españolas del siglo XNUMX. A pesar de su corta existencia, su nombre se erige como uno de los más emblemáticos entre los poetas de la historia hispana.
El escritor nació el 5 de junio de 1898 en Fuente de Vaqueros, un pequeño pueblo campesino de la vega de Granada, Andalucía, Reino de España. Sus padres fueron Vicenta Lorca Romero (maestra de escuela) y Federico García Rodríguez (terrateniente). Tenía un hermano, Francisco, y dos hermanas, Conchita e Isabel.
La vida en el campo marcó gran parte de su inspiraciónA pesar de que toda la familia se trasladó a la ciudad de Granada en 1909, cuando Federico tenía once años. Este traslado le afectaría notablemente, como relató más tarde en un ensayo autobiográfico sobre el entorno rural de Fuente de Vaqueros.
Muchas de esas experiencias sensoriales (el canto de los pájaros, el correr de los ríos, el olor de la hierba, el sabor de las frutas, las imágenes de la luna…) las evocó más tarde. Además, Federico, el niño, pasó muchos veranos en la zona rural de Asquerosa (actual Valderrubio). En ese lugar, rodeado de naturaleza, escribió sus primeros poemas.
La Revolución Francesa: Curso acelerado de Historia Universal #29
Federico García Lorca llegó por primera vez a la Residencia de Estudiantes de Madrid en 1919, como estudiante de Derecho, y nunca más se alejó de aquella «fábrica de intelectuales». Hasta su muerte, en 1936, pasó de ser uno de los ocupantes de las habitaciones para los estudiantes a ser conferenciante en el refinado salón de actos, donde afirmaba haber asistido a «unas mil conferencias».
La Residencia fue «una de las experiencias de creación e intercambio científico y artístico más vivas y fructíferas del periodo de entreguerras en Europa; una casa abierta a la creación, al pensamiento y al diálogo interdisciplinar de la que surgieron muchas de las figuras más destacadas de la cultura española del siglo XX».
Ahora este legado vuelve definitivamente a Granada, para quedarse en el fantástico edificio construido expresamente para albergar los fondos de la Fundación Lorca. Federico se despide de nuevo de la Residencia y lo hace con la exposición Una habitación propia. Federico García Lorca en la Residencia de Estudiantes. 1919-1936 (Una habitación propia. Federico García Lorca en la Residencia de Estudiantes. 1919-1936.)
El rinconcillo lorca
Cuando se trata de investigar, me interesan muchas cosas. Pero lo que me interesa estudiar ahora es la historia profundamente problemática y la interconexión entre las escuelas y los espacios carcelarios, siendo la prisión y los espacios dentro de las prisiones uno de ellos. Me interesa saber cómo la carceralidad parece filtrarse en los espacios donde los jóvenes y los adultos navegan por complejos contextos interinstitucionales. También soy una estudiosa de la abolición, por lo que pienso de forma cuidadosa y crítica sobre cómo podría ser un marco abolicionista en el espacio de la educación y la escolarización, donde se supone que tiene lugar el «aprendizaje» y el «desarrollo» de los jóvenes. Por último, me interesan las formas en que las geografías escolares-carcelarias-abolicionistas son lugares en los que se reformulan o rearticulan los proyectos de creación o mantenimiento de diferencias, y exploro qué forma adoptan (por ejemplo, a través de la raza, la etnia, el género, la capacidad, etc.).
Soy una candidata al doctorado de primera generación en Literatura Comparada que trabaja en una disertación que ofrece un relato encarnado de la intimidad a raíz de la pandemia y el movimiento #MeToo. Uno de los objetivos centrales de mi beca es recentrar las feminidades latinas queer dentro de la teoría femme y los estudios críticos de la feminidad: como la teoría queer trabaja para entender mejor las feminidades no normativas, las bailarinas, escritoras y pensadoras latinas queer tienen mucho que enseñarnos sobre el potencial estratégico de la feminidad. Soy una india de África Oriental originaria del Reino Unido. Mi familia se remonta a Kampala, Nairobi y Gujarat. Aunque solo llevo en California desde 2017, veo muchos paralelismos y oportunidades de solidaridad entre la comunidad asiática británica de clase trabajadora y la población latina de Estados Unidos. Estoy agradecida a El Centro por acogerme siempre en la comunidad, aunque no encaje perfectamente en los marcos de identidad racial y de clase centrados en Estados Unidos.
El mismo tipo de diferencia que yo Trailer (2017)
Era una época propicia para vivir en la Residencia de Estudiantes de Madrid y estudiar en la Escuela de Bellas Artes. Cuando llegó de Cataluña en 1922, Salvador Dalí conoció al futuro poeta Federico García Lorca y al futuro cineasta Luis Buñuel. Dalí era un caso de estudio, vestido como un dandy británico del siglo anterior, con apariencia femenina. No cabe duda de que era un pintor dotado. Se convertiría en un hombre bastante repugnante. «Cenicientas» se centra en la atracción no consumada entre Dalí (Robert Pattinson) y García Lorca (Javier Beltrán), que en la flor del idealismo juvenil y con el despertar de la carne, empezaron a confundir la sexualidad con el arte. No se sabe mucho de su romance, tal como fue, pero en la conservadora nación católica de la época, y dado el extremo terror de Dalí a la sífilis, parece haber sido apasionado pero platónico.